Conocido como un test o análisis de manchas simétricas de tinta plasmadas en 10 láminas diferentes, el Test de Rorschach desde su creación en 1921 por el psiquiatra y psicoanalista suizo Hermann Rorschach hasta la actualidad ha ampliado sus ámbitos de uso en la psicología, abarcando tanto la clínica infantil, adolescente o de adultos como el ámbito forense, educacional y laboral-organizacional.
Muchas personas que postulan a un determinado puesto de trabajo durante la entrevista laboral deben responder un test basado en la percepción de manchas. Sin embargo, Ruth Weinstein, docente del área de Psicodiagnóstico del Departamento de Psicología de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Chile aclara que esta prueba no fue pensada para selección de personal. En su lugar, “se creó otro similar llamado Test de Zulliger, una variante de tres láminas que se puede aplicar incluso de modo colectivo”.
Al igual que otras pruebas creadas posteriormente son “proyectivas” debido a que el estímulo carece de una estructura formal, siendo simplemente una mancha u otro elemento a interpretar, para luego –a través de respuestas verbales o gráficos– expresar lo que se percibe, cuya se basa en el pensamiento, reconocimiento, memoria, afectos o emociones personales. De esta manera el(a) entrevistado(a) demuestra su modo de ser, tipo de personalidad y cómo concibe o entiende al mundo exterior.
Su vigencia y aportes, especialmente en la psicología clínica, así como también la importancia de otros mecanismos de evaluación proyectiva serán discutidos en el XVI Congreso Latinoamericano de Rorschach y otras Técnicas Proyectivas, organizado por el Departamento de Psicología de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Chile junto a otras instituciones, entre el próximo 22 y 25 de Julio.
-¿A qué se debe la recurrencia en el uso del Test de Rorschach en la psicología?
El Test de Rorschach es eminentemente clínico, así fue creado y siempre ha funcionado en dicha área. Con el paso del tiempo, también se ha ido extendiendo en clínica para adultos e infantil y más tarde se extendió al área forense. Además, se ha utilizado en mucha menor medida en el área laboral, porque siendo una herramienta clínica funciona, especialmente, cuando se requiere descartar postulantes para un puesto de trabajo que demande gran responsabilidad como portar armas, dinero o un cargo de alta jefatura, por lo que en esos casos es pertinente contar una evaluación en profundidad. Pero básicamente funciona muy bien para hacer diagnósticos clínicos y descripción de la personalidad en áreas: cognitiva, afectiva y de relaciones interpersonales.
Tras casi 100 años de su creación, la prueba sigue funcionando porque evalúa características de personalidad, es decir permite hacer una descripción profunda de ella y también hacer diagnósticos. Sirve para detectar cuando la persona está deprimida, cuán deprimida se encuentra o si es psicópata.
Siendo una de las herramientas más efectivas para hacer diagnósticos presenta un obstáculo en la actualidad. Hoy, con Internet muchas personas buscan en la web cuáles son las respuestas más adecuadas, por lo que es necesario explicar que una parte de la prueba tiene relación con las respuestas verbales y otro nivel se vincula con la forma en que la persona da la respuestas, lo que obliga al(la) examinador(a) poseer experticia y una actualización constante.
La prueba funciona porque –como todos saben– son manchas de tinta muy inestructuradas. La base de la prueba es que como carecen de una estructura la persona no sabe lo que debe hacer, por tanto, lo que se responde tiene que ver con el(a) entrevistado(a). Por tanto, cuando se las respuestas son aprendidas previamente se recitan, en tal caso un(a) especialista que está atento(a) debiera reconocer cuando alguien contesta de memoria.
-Existen ciertas percepciones comunes en torno a las figuras que representan las manchas. Al respecto, ¿hay interpretaciones “aceptadas” o “rechazadas”?
Diversos estudios indican cuáles son las respuestas más frecuentes e insisto que la gente tiende a pensar que al buscarlas en la web dará con la manera “correcta” de responder, pero se ignora que más allá de la respuesta en sí hay una serie comportamientos no verbales detrás y que no se pueden imitar.
En el fondo, el Test de Rorshach consiste en una entrevista en profundidad mediatizada por un instrumento que ayuda a dilucidar cuando una persona presenta o no algún tipo de patología mental.
-¿De qué manera este tipo de técnicas reflejan prácticas o representaciones socio-culturales de una determinada sociedad?
La carga cultural no tiene mucha incidencia porque la prueba está diseñada para que un ser humano de distinta edad y contexto socio-cultural responda de una cierta manera. Es muy amplia la forma de responder, siendo también acotada en otras aristas ya que se trata de la percepción visual de unas manchas, por tanto, las percepciones de las mismas se asemejarán a figuras particulares.
Sin embargo, la interpretación posterior de algunos elementos puede tener relación con la cultura, porque culturalmente puede presentar ciertas variaciones pero en menor medida ya que esta herramienta está pensada para que sea acultural y atemporal. Es como el cuadro de la Mona Lisa, cuyo impacto perdura porque corresponde a una visión del ser humano.
Se espera que haya un desarrollo evolutivo y variaciones en el modo de responder particular cuando se trata de niños niños(as) y adultos. En este sentido, se debe reconocer cuando las respuestas fueron proporcionadas por un(a) niño(a), por ejemplo. Luego, sus resultados permiten hacer un diagnóstico de personalidad o hipótesis diagnósticas para continuar con el tratamiento.
-Frecuentemente en entrevistas de trabajo se emplea como mecanismo de selección la visualización de manchas. Siendo una herramienta fundamentalmente clínica ¿es aplicable en el proceso de selección de personal?
La prueba no fue construida para selección de personal y eso quisiera dejarlo muy claro. Posteriormente, se creó otra similar llamada Test de Zulliger que es una variante de tres láminas, muy parecidas a Rorschach y que la puedes aplicar de modo colectivo y esa es la que debiera ser utilizada para selección, porque el Test de Rorschach da mucho indicadores clínicos que no son necesarios en selección laboral.
En el ámbito organizacional, los(as) psicólogos(as) necesitan medir competencias para encontrar al(la) mejor postulante, por lo que sería un error usar este test y es que, reitero, la riqueza de la prueba radica en el ámbito clínico, siendo muy sensible a cuadros de depresión o psicosis, porque fue elaborada para diagnosticar este tipo de enfermedades.
Posteriormente, se creó la psicología jurídica y forense para buscar indicadores de abuso y otros. La fortaleza de la prueba reside en la evaluación del daño, y los indicadores aparecen pero son menores al daño. Siempre hay que seguir dos pasos: la lectura de la prueba y la interpretación sobre lo que significan esos indicadores.
-¿Cuáles son las otras pruebas proyectivas que se usan habitualmente en psicología y que serán abordadas en el Congreso?
Como el Test de Rorschach ha trabajado tan fuertemente el diagnóstico, se necesitaron más pruebas que se complementen y obtener mayor información y minimizar factores de error. Entre estas otras pruebas están las gráficas, muy amigables sobre todo para los(as) niños(as), por ejemplo aquellas donde hay que dibujar una persona bajo la lluvia, el árbol, la persona con la familia y distintos tipos de dibujo con una serie de indicadores que guardan relación con aspectos emocionales que trascienden a los dibujos. A los niños(as) les gusta realizar este tipo de pruebas, mientras que a los adultos les causa rechazo porque no les gusta dibujar.
-Al contemplar las emociones en este tipo de pruebas ¿inciden las variables circunstanciales o situacionales en el modo en que una persona dibuje?
Sí pero el especialista también extrapola esos dibujos a rasgos de personalidad, relaciones personales y al mundo de las emociones. Existen otras pruebas narrativas donde se cuentan historias como el Test de Apercepción Temática (TAT) o su versión infantil (CAT), muy utilizada por quienes trabajan con niños o el de Phillipson.
Con el tiempo se aprende que la prueba entrega indicadores circunstanciales, como cuadros clínicos del presente o situaciones por las cuales pueda estar pasando el consultante y otros referentes a rasgos de personalidad. Todas estas pruebas tienen muchos indicadores diferentes que apuntan a un mismo elemento de modo que la interpretación no sea al azar.
Por ejemplo, al evaluar autoestima disminuida en las pruebas gráficas hay varios indicadores, en el Test de Rorschach otros tanto y en las pruebas narrativas otros, luego de su realización y cruce se puede concluir que la persona posee una baja autoestima.
La genialidad de Hermann Rorschach es que pudo crear una prueba de personalidad en base a manchas de tinta, y en base a ella poder describir la personalidad y hacer diagnósticos de cuadros clínicos, siendo una prueba no superada en profundidad y eficacia a lo largo del tiempo.